Nadie presta atención al cielo, hasta que se enamora

lunes, 1 de agosto de 2011

y entre la gente, tú y tu suspicacia.

Porque te obliga a mentir, a no creer en ti, a odiar lo que posiblemente te gustaría, a mirar sobre sus hombros, a sentir desprecio, a no apreciar lo hermoso, a juzgar, a contradecirte, a errar , a sentirte culpable, a no confiar, a admirar lo inhumano, a sentirte muerto. Cuánto amor me rodea... Y el problema no es querer a alguien. El problema es que cada ser humano tiene un concepto de “cariño” demasiado diferente. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario