Porque te obliga a mentir, a no creer en ti, a odiar lo que posiblemente te gustaría, a mirar sobre sus hombros, a sentir desprecio, a no apreciar lo hermoso, a juzgar, a contradecirte, a errar , a sentirte culpable, a no confiar, a admirar lo inhumano, a sentirte muerto. Cuánto amor me rodea... Y el problema no es querer a alguien. El problema es que cada ser humano tiene un concepto de “cariño” demasiado diferente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario