Nadie presta atención al cielo, hasta que se enamora

miércoles, 16 de febrero de 2011

algunas cosas se ven, otras se sienten

Desde siempre ha sido adicta a las pequeñas cosas. Prefiere pequeñas demostraciones que grandes palabras. Las palabras se van con el viento, pero los hechos, aunque sea en nuestra memoria, permenecen intactos, incluso los que más duelen.
Le ganan con el más mínimo detalle, y suele conformarse con lo que tiene. Sin embargo a veces se planta si eso es realmente bueno.




2 comentarios:

  1. Si definitivamente lo hechos valen más que las palabras, porque además de que se las lleve el viento, decir las cosas es muy fácil pero cumplirlas ya es otro cantar.

    Sólo con los actos descubrimos a aquellos que realmente valen la pena.

    Un saludo ; )!!!

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  2. qué cierto...
    muchas gracias, un beso(:

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